Parte 2: La revolución humana
Capítulo 13: Fe para la armonía familiar [13.1]

El presidente Ikeda ha establecido cinco guías eternas para la Soka Gakkai: 1) Fe para construir una familia armoniosa; 2) fe para ser felices; 3) fe para superar obstáculos; 4) fe para tener una vida larga y saludable, y 5) fe para lograr la victoria absoluta. (Un extracto del discurso de 2003 en que expuso dichos principios aparece con el subtítulo «Lecturas complementarias», en la última parte de este capítulo.)

Este apartado se centra en la primera de estas cinco guías: «Fe para construir una familia armoniosa».

El afán de establecer la armonía familiar comienza por nuestro propio cambio interior o «revolución humana». Quienes nos rodean son, en verdad, el espejo que refleja ese proceso transformador. Cuando nosotros cambiamos, también lo hacen las demás personas, el medio ambiente y el mundo. La familia es uno de los ámbitos fundamentales y más importantes donde se aprecia la gesta de nuestra revolución humana.

En esta selección, el presidente Ikeda analiza la importancia de perseverar en la fe con el objetivo de crear familias felices y armoniosas. Plantea que la revolución humana de un sujeto invariablemente conducirá a un cambio positivo en su familia.

Una guía eterna enunciada por el segundo presidente de la Soka Gakkai, Josei Toda, ha sido la «fe para construir una familia armoniosa».

Una familia alegre y positiva, unida por lazos de confianza y de afecto, refleja un espíritu puro y rico. Al mismo tiempo, es el primer paso y la meta última que buscamos alcanzar en nuestro esfuerzo por crear un mundo de paz y de felicidad.

Con los años, incontables miembros de la Soka Gakkai han convertido un ámbito familiar negativo y oscuro en un hogar luminoso y lleno de dicha. Esta es la orgullosa historia personal de revolución humana lograda por cada individuo y, a la vez, la profunda y firme base que sustenta la historia de la Soka Gakkai.

Con su triunfo en la creación de familias armoniosas, los miembros de la Soka Gakkai están ofreciendo un modelo válido para todas las personas y, creo yo, un símbolo radiante de cara al futuro del Japón y del mundo.

Nuestro propósito es concretar una sociedad ideal donde la dicha de cada individuo avance de la mano del progreso social, lo cual, desde luego, implica la existencia de familias armoniosas. La clave para construir una vida familiar sólida y sana es que cada persona, basada en la Ley Mística, procure establecer una existencia segura y firme mientras, a la vez, contribuye a la prosperidad colectiva y a la paz mundial.

No todos los que deciden practicar el budismo Nichiren son acompañados desde el principio por sus familiares. En ciertos casos, reciben la tenaz oposición de algunos de sus seres cercanos. Pero esa confrontación está para poner a prueba su fe; sin falta uno podrá superarla cuando haya hecho su revolución humana y se haya convertido en un excelente integrante de su familia y de la sociedad.

El capítulo «Asuntos pasados del rey Adorno Maravilloso» (27.°) del Sutra del loto narra las vivencias pasadas de los bodisatvas Rey de la Medicina y Medicina Superior en una existencia anterior, cuando habían vivido como los hermanos Acervo de Pureza y Ojos Puros. Junto a su madre, Virtud Pura, ambos se esforzaron por acercar a su padre, el rey Adorno Maravilloso, a la fe en el budismo. Para ello, Acervo de Pureza y Ojos Puros desplegaron diversos poderes sobrenaturales. Esto es una metáfora que ilustra las fuerzas del Buda y de la Ley. Y, en términos contemporáneos, no es otra cosa que dar prueba de la propia revolución humana.

Creo que toda revolución genuina, que en verdad sirva a las necesidades de la gente, también se manifestará con claridad en la familia. Esa es la transformación más fundamental y duradera; de ella surgirá un oleaje permanente que marcará la marea de los tiempos y que nada ni nadie podrá frenar.

Del editorial titulado «Fe para construir una familia armoniosa», publicado en japonés en el Daibyakurenge de abril de 1968.