Parte 2: La revolución humana
Capítulo 14: «¡Sean buenos ciudadanos!» [14.6]
14.6 Una vida de contribución
En relación con el pensamiento del fundador de la Soka Gakkai y primer presidente, Tsunesaburo Makiguchi, el señor Ikeda explica que la Soka Gakkai es una organización humanista, que promueve en sus miembros una vida de contribución, orientada a la felicidad propia y ajena.
El señor Makiguchi hacía hincapié en la importancia de forjar personas capaces de convivir armoniosamente con los demás, en lugar de vivir a merced del egoísmo y el interés personal. Como brillante educador que fue, supo formar «individuos con la inteligencia de reconocer sus propias limitaciones y descubrir las virtudes de los demás».1 También bregó por forjar «individuos generosos que complementaran sus falencias con las fortalezas de los semejantes, y suplieran las fallas ajenas con sus propias capacidades».2
Este es el espíritu esencial de la educación Soka y la clave para crear una familia Soka armoniosa.
Espero que nuestros miembros, cada uno en su país y comunidad, avance con esta bella unión de is «distintas personas con un mismo propósito».
El señor Makiguchi también sostenía que había tres diferentes niveles de vida: 1) una vida dependiente; 2) una vida independiente, y 3) una vida contributiva.3
En sentido amplio, una vida dependiente es la que carece de dirección o de rumbo preciso, y tiende a ser controlada por las circunstancias.
Muchas religiones a lo largo de la historia han exigido a sus creyentes fe ciega y los han privado de autonomía. El señor Makiguchi se oponía rotundamente a esta sumisión acrítica. Pensaba que las personas debían tener una sólida independencia como personas y avanzar de manera autónoma por el camino elegido. Esta sería la descripción del segundo nivel: la vida independiente.
Además, proponía que nos eleváramos hacia el nivel siguiente, en el cual es posible poner en práctica el respeto a los demás y dar cabida al bienestar y la felicidad de los otros en lugar de vivir únicamente centrados en la satisfacción egoísta y en las demandas del yo. Estamos hablando aquí de la vida contributiva, cuyo propósito es lograr, simultáneamente, la felicidad propia y ajena.
El señor Makiguchi nos exhortó a construir una red de personas esclarecidas, que recorrieran el trayecto desde la dependencia hacia la independencia, y de esta última a la contribución activa, procediendo con plena libertad y brillando al máximo.
La Soka Gakkai es una organización de noble humanismo, cuyos miembros muestran en acción el significado de la vida colaborativa. Basados en la gran Ley de la vida, contribuyen incansablemente al bienestar de los demás, el florecimiento de la cultura y la sociedad, y el logro de la paz mundial.
Del discurso pronunciado en la conferencia panpacífica de la SGI para la paz y la cultura, celebrada en los Estados Unidos, el 29 de enero de 1995.
La sabiduría para ser feliz y crear la paz es una selección de las obras del presidente Ikeda sobre temas clave.